jueves, 18 de diciembre de 2008

lo tienes corriendo en la sangre

Abismos grises que se relatan a sí mismos
tormentas mudas que se lo llevan todo
demonios
muchos demonios
suaves manos
ojos negros
el cielo rojo
el cielo rojo
el principio del fin
entre dos puntos
colapsan las rectas
se indefinen los intersticios
abismos negros que se relatan a sí mismos
dolor que se enumera
seres que se aspiran
grandes olas que crecen
grandes olas que caen
fuertes golpes de agudeza
indolentes tiros a matar
matar matar
morir
desaparece la verdad
se corrompe todo
duro y tibio duele cuando te hablo
simple y real cuando te pego
entrañas que vuelan
soledad que pide más
es un horror profundo
que traga todo
que todo convierte
que todo necesita
en lo que todo habita
en lo que todo se halla
es un profundo dolor donde todo se escucha
donde todo ha pasado
donde hay vida y muerte a un mismo tiempo
es una oscura verdad absoluta
que permanece más allá de nosotros
es un oscuro abismo que traga
un oscuro precipicio
una eterna vuelta
es el sol quemandote
es la noche cazando
todo miedo, toda paranoia, toda bomba, cada gota de sudor
cada grano de sal, cada gota de salitre
cada enfermedad
y cada enfermo
lo ves en todas partes
lo ves en ti
en quienes amas
en quienes odias
lo tienes corriendo en la sangre
parece veneno
pero es sustento
es maquina que hace girar
es el mundo que vemos crecer
soy yo




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Tu cuerpo será menos recipiente de mediatez que templo de diálogo con lo eterno